Los créditos entre particulares son una nueva alternativa que se ha potenciado desde que se va tomando confianza a las transacciones por internet. La red permite la comunicación fácil y rápida entre particulares y conecta a quienes precisan financiación con quienes dan crédito como una alternativa de inversión. En lugar de invertir en bolsa o depositar fondos en entidades bancarias o comprar deuda pública, otorgan crédito con el fin de mejorar su rentabilidad a través del cobro de unos intereses que a la parte contraria también le convenga.
Hay varias redes de contacto para realizar créditos entre particulares en donde se pactan créditos que en total suman millones de euros y generan una cantidad importante de intereses que son ingresos para unos (los prestamistas) y gastos para los que reciben el dinero, lógicamente.
Estas comunidades de créditos entre particulares no son un banco sino que son una alternativa a los bancos poniendo en contacto a particulares que necesitan dinero con otras personas que quieren dejarlo con el fin de cobrar unos intereses y así obtener una rentabilidad. Las más conocidas forman parte de la Asociación Nacional de Establecimientos Financieros (ASNEF) y es una realidad que se están produciendo en el mercado de habla esañola y que previamente ya hay experiencias muy conocidas en Estados Unidos o Gran Bretaña.
Desde estos sitios se motiva a los inversores con el lemas como ahorra prestando dinero y recomienda al inversor o prestamista, es decir, a quien quiere prestar dinero, que hagan pequeños préstamos o que realicen participaciones en préstamos, con el fin de diversificar el riesgo y no concentrarlo en una sóla persona. Para el solicitante del crédito de otro particular, los pasos a dar están muy bien indicados, ya que completan un formulario donde ponen la cantidad que necesitan, el plazo en que lo van a devolver y, en consecuencia, la cuota a pagar.
Todo funciona con mucha rapidez ya que enseguida esa demanda de dinero es conocida por quienes pueden prestar que eligen la cantidad que desean prestar a ese solicitante en función de su perfil de riesgo y el destino que le van a dar al crédito recibido, todo ello de forma anónima.
Por lo general, la tramitación hasta recibir el dinero puede durar dos días y se puede devolver antes de tiempo sin ninguna penalización ni tener que pagar ningún tipo de comisiones por cancelación anticipada.
